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A la cima

se llega en

A la cima se llega

EN TACONES

 

Por: Daniela Villalobos, Andrea Palacio, Jorge Cruz

Imaginemos a la mexicana de hoy, ella no se dedica exclusivamente a la atención de su hogar, sino que es gerente de importantes compañías, dueña de su propia empresa, investigadora o presidenta de alguna asociación. Su estilo de liderazgo único la ha llevado tan lejos como a algunos hombres, lo cual, a pesar de la enorme cantidad de retos que aún enfrenta, ha definido su imagen en este siglo.

 

Alemania, Argentina y Brasil han encomendado sus gobiernos en las manos de Angela Merkel, Cristina Fernández y Dilma Rousseff respectivamente. México acaba de vivir sus segundas elecciones presidenciales con una candidata mujer y varios nombres femeninos figuran dentro de los puestos directivos de empresas como General Motors, Telcel y Metlife. Además, un tercio del Sistema Nacional de Investigadores está conformado por mujeres.

 

¿Qué las motiva a romper los antiguos paradigmas? Para Jimena Pardo, cofundadora de Carrot (primera empresa de autos compartidos en México), la importancia de que las mujeres salgan a trabajar radica en la creciente necesidad económica pero principalmente en el deseo de realización personal.

 

LAS GANAS DE TRIUNFAR NO TIENEN GÉNERO

 

Karla González se dio cuenta de que no iba a poder ser bailarina después de romperse algunos ligamentos, pero eso no le impidió fijarse nuevas metas. Al cabo de unos años concluyó la licenciatura en Mercadotecnia, su trayectoria profesional incluye puestos en compañías como L’Oreal y Lancôme, además de la elaboración de su propio negocio con enfoque ecologista, Hope in Green y ser socia del despacho de consultoría GMS.

 

 “Todos los astros estaban alineados para que se diera la oportunidad de bailar, -estaba en el lugar y el momento correcto.- ¿Entonces qué  hago? Decidí estudiar mercadotecnia. Cuando regresé a México mi principal objetivo estaba enfocarlo en el arte  porque (aquí) el arte está muy abandonado”, platicó.

 

Dentro de las empresas, las habilidades femeninas solo difieren de las masculinas en cuanto a su enfoque, como advierte Martha Rivera Pesquera, presidente del Consejo del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (Cimar), del IPADE. Reconoce que, por su psicología, ellas son más maternales, delicadas y conciliadoras, y que esto lo trasladan a sus lugares de trabajo.

 

Al dividir sus horas entre distintas actividades, las mujeres han demostrado ser excelentes administradoras del tiempo. Para Victoria Carreras, o ‘Vicky’, como prefiere ser llamada, la organización es indispensable. Hacer las cosas a su tiempo la ayudaron a combinar las carreras de Danza y Ciencias Computacionales en su natal Cuba. “En el momento en que me encargan algo, cuando tengo el primer pedazo de tiempo libre lo hago” apuntó.

 

Vicky también demuestra la capacidad de las mujeres para desarrollarse en distintos sectores. Dentro de la Universidad Panamericana funge como directora de la carrera de Animación Digital y es profesora de baile. Como parte de su trabajo doctoral dentro de la Facultad de Ingeniería, este año le otorgó a la casa de estudios su primera patente con el nombre “Procesamiento e interpretación automatizada de imágenes, apoyada en la segmentación y equipo para llevar a cabo este procedimiento”.

 

EL SIGNIFICADO DE EMPRENDER

 

Para Liliana González de la Cueva, arquitecta con especialidad en iluminación, el significado de esta palabra podría definirse como la correcta solución de diseño a un proyecto. La primera mujer en presidir la Sociedad de Ingenieros en Iluminación (IALD por sus siglas en inglés), opina que una emprendedora debe caracterizarse por su autenticidad y liberación de toda creencia que le impida lograr sus metas.

 

Para Karla su experiencia laboral la convirtió en la emprendedora que es ahora. “Fue muy importante haber trabajado en un corporativo porque me forjó la parte de la disciplina, me hizo poliglota y me dio la ‘cosquillita’ de querer hacer algo más, algo diferente”, comentó.

 

Por su parte Jimena Pardo opina que “emprender es no solo crear algo de valor y algo que cree capital (…), sino algo que pueda dar una solución tangible a nuestras ciudades, a nuestra sociedad y al país”, afirmó.

 

Al menos una quinta parte de los emprendedores son mujeres y su talento está distribuido en muchos campos como la investigación científica, el desarrollo sustentable, la solución a problemas de negocios o la apertura de nuevas empresas, como las del 26 por ciento de las mujeres que son empleadoras o trabajan por su cuenta.

 

ENTRE DOS TRINCHERAS

 

Conforme aumenta la presencia femenina en el mundo profesional, aumentan los retos y responsabilidades que el trabajo conlleva. Actualmente uno de cada cuatro hogares es mantenido por una sola mujer y aproximadamente el 70 por ciento cuenta con aporte de ingresos femeninos.

 

Sin embargo, la familia sigue siendo una prioridad. Según el INEGI más de la mitad de las mujeres emprendedoras están casadas, y la mayoría educan de dos a tres hijos. Es así que la flexibilidad de las organizaciones en cuanto a las demandas familiares representará siempre una ventaja para las trabajadoras.

 

Liliana González se ha visto envuelta en esta situación, “creo que ha sido un reto muy importante el nunca perder la visión de empresaria, pero a la vez tener un matrimonio, ser la corresponsable de una familia de dos hijos y revisar que haya desde comida en el refrigerador (…) hasta gas, luz y teléfono”, comentó.

 

Hacia el tercer lustro del siglo XXI y gracias al esfuerzo de mujeres emprendedoras, la percepción del sexo femenino está lejos de ser la estigmatizada e inmóvil imagen de otros años. Es así que la próxima vez que alguien solicite asesoría empresarial, un proyecto de iluminación, necesite rentar un coche o asista a un examen médico, estará recibiendo los beneficios del ingenio, talento y habilidad de las mujeres que ya comenzaron la carrera por dejar su huella en el mundo.

Universidad Panamericana- Periodismo Digital y Prácitcas Profesionales

por: Jorge Cruz Ibarra, Andrea Palacio y Daniela Villalobos

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